KENNETH HESKETH

(Liverpool 1968)

Masque

(2001) – 6'

PAUL HINDEMITH

(Hanau, Alemania 1895 – Frankfurt, 1963)

Sinfonía en Si b para banda

(1951) – 19'

1. Moderately Fast, with Vigor
2. Andante Grazioso
3. Fugue (rather broad)

PAUSA 20'

GEORGE BIZET

(París 1838 – Bougival, Francia 1875)

Sinfonía Carmen

(1875 / 2004) – 34

Arreglos de José Serebrier – Instrumentación de Donald Paterson

1. Prelude
2. The Cavalry
3. Habanera
4. Seguidilla
5. Fugato
6. Interlude 1
7. Toreador
8. Interlude 2
9. Andante cantabile
10. Interlude 3
11. The Wedding
12. Gypsy Dance

COMENTARIO

por Jacobo Zabalo

La transcripción de óperas para conjuntos instrumentales data de antiguo, y son especialmente celebradas las versiones para vientos de las mozartianas, con conjuntos de Harmoniemusik que podían recrear sus escenas en parques o jardines, sin necesidad de escenarios ni cantantes. Entre las diversas adaptaciones para orquesta que se han realizado de Carmen ―después de las dos suites, obra del propio Georges Bizet, que cuentan con seis piezas cada una― destaca la del compositor y director uruguayo José Serebrier, estrenada bajo el título Carmen Symphony. Su grabación al frente de la Orquesta de Barcelona y Nacional de Cataluña fue galardonada con un Grammy en el año 2004. Compuesta por doce episodios, el arreglo de Serebrier se caracteriza por el seguimiento fiel a la evolución de la trama operística y por la oportuna elección de instrumentos que suplen las prestaciones vocales. Dignos de mención son, por ejemplo, la sustitución del trombón por la trompeta en la “Canción del toreador” y el solo de saxófono en la “Habanera”.

La vivacidad del conocido “Preludio” se mantiene en esta versión de Carmen, incorporando motivos musicales que reaparecerán, al estilo wagneriano. Normalmente posicionada en el 'top 3' de las más interpretadas en todo el mundo, se trata de una ópera tan popular como problemática. Y es que, junto al exotismo del folclore hispánico, que busca evocarse en ritmos y armonía, el peso de la narración escénica recae en la figura protagonista. Durante un tiempo (des)calificada como femme fatale por el libre ejercicio de su voluntad y su deseo, Carmen atrae y desconcierta a partes iguales, al no dejarse poseer. “You will never have me”, susurrará a su amante la protagonista de Lost Highway de David Lynch, en un desdoblamiento fantasioso que actualiza el vértigo hitchkockiano, escenificado también por Luis Buñuel en su legado final, Ese oscuro objeto de deseo. Tramas que, como Carmen, relatan el trastorno infantil –y violento– de aquél que pretende ejercer el control de lo que no puede ser poseído.

Sin un argumento ni mucho menos tan marcado ni ningún tipo de programa, con motivo de este concierto se interpretará asimismo la desafiadora Sinfonía en si bemol para banda de Paul Hindemith, estrenada en 1951 bajo la dirección del propio compositor, ante la US Army Band “Pershing’s Own”. Se trata de una pieza compleja en términos de contrapunto, con una instrumentación rica y numerosa ―tanto en maderas como en metales y percusión―, que exige al conjunto una gran habilidad técnica y una coordinación excelente. Un desarrollo virtuosístico que parece llevar al límite la expresividad de los vientos, en una proliferación de interrelaciones que, sin duda, captarán la atención de los oyentes.