RAMON RAMOS
(Alginet 1954 – 2012)

Passacaglia

(1991) – 10'

ARNOLD SCHÖNBERG
(Viena 1874 – Los Angeles 1951)

Tema y variaciones, op. 43a

(1943) – 10'

I. Tema: Poco allegro
II. Variación n.º 1
III. Variación n.º 2: Allegro molto
IV. Variación n.º 3: Poco adagio
V. Variación n.º 4: Tempo di valse
VI. Variación n.º 5: Molto moderato
VII. Variación n.º 6: Allegro
VIII. Variación n.º 7: Moderato
IX. Finale: Moderato

JOSEP VICENT EGEA
(Cocentaina 1961)

Americanismo

(1997) – 15'

DMITRI SHOSTAKÓVICH
(San Petersburgo 1906 – 1975)

Suite para orquesta de variedades. Suite para orquesta de jazz n.º 2

(1956) -Arranjaments de Johan de Meij i Steven Walker – 18

I. Marcha
II. Vals lírico
III. Danza n.º 1
IV. Pequeña Polca
V. Danza n.º 2
VI. Vals n.º 2
VII. Finale

COMENTARIO

por Jacobo Zabalo

Stanley Kubrick era un maestro en el arte de encontrar música para sus películas. Las icónicas imágenes de la estación espacial de 2001 flotando en insólita armonía con los valses de Strauss, pero también la recreación histórica que escenifica en Barry Lyndon o la inquietante apropiación de Beethoven en La naranja mecánica son probablemente los ejemplos más ilustres de una filmografía coronada por su obra póstuma, el legado con el que cerró su carrera cinematográfica. El vals más conocido de los que compuso Shostakóvich abre Eyes Wide Shut e introduce al espectador en el mundo del glamur neoyorquino, la sensualidad onírica y la gestión de los afectos. Es solo la vía de entrada en una trama llena de elementos disonantes, relativos a la vida íntima de los protagonistas, que eran pareja también en la vida real en el momento del rodaje. Inicialmente, se asoció la pieza a la Suite de jazz n.º 2, pero la atribución es errónea, porque en realidad corresponde a la Suite para orquesta de variedades de 1956, justamente la obra que hoy será interpretada y que contiene una serie de piezas de baile ―marchas, polcas y valses― concebidas por Shostakóvich en época tardía, posterior a las dos suites de jazz, que datan respectivamente de 1934 y 1938. La música es suntuosa y colorida, con ritmos marcados y una escritura para viento y percusión que transporta al oyente.

El dinamismo y la medida de los tiempos son característicos, también, de la obra con la que se inaugura el concierto: una Passacaglia de Ramon Ramos, compositor y pedagogo valenciano formado en Alemania, que también se interesó por la música de vanguardia y que asistió a jornadas impartidas por creadores tan eminentes como György Ligeti, Mauricio Kagel o György Kurtág, además de trabajar con Wolfgang Rihm.

La influencia de las nuevas pautas expresivas, algunas de ellas de procedencia foránea, la encontramos igualmente en Americanism, de Josep Vicent Egea. Una obra de 1997 en la que el lenguaje cinematográfico parece proceder de la misma partitura, con contrastes rítmicos y tímbricos que captan la atención del oyente, como para inducirlo emocionalmente a la experiencia narrativa.

Un poco más abstracto, pero a distancia del resto de su opus, Theme and Variations, op. 43a, de Arnold Schönberg, es una piedra angular del repertorio de bandas de viento. Terminada en verano de 1943, el compositor alemán pretendía que la pieza pudiera ser interpretada por conjuntos amateurs. A pesar de su aparente sencillez, incorpora retos y golpes de efecto que requieren una destreza considerable. La obra, que se aleja del atonalismo característico de su revolución compositiva, evidencia una depuración de los sonidos que amplifica su expresividad global, a la vez que exhibe una variedad enorme de registros.