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por Joan Arnau Pàmies

En el mundo de la improvisación libre, pocos nombres resuenan con tanta intensidad e innovación como el de Pulverize the Sound, el trío de Peter Evans, Mike Pride y Tim Dahl. Con este concierto, coproducido con el Festival Mixtur, la formación aterriza en Cataluña para explorar las fronteras de la expresión musical con una energía y un nivel de creatividad que cuestionan algunas de las convenciones musicales más establecidas. La música de esta noche no solo celebra el arte de la improvisación, sino también el de la experimentación sonora y el virtuosismo extremo.

Pulverize the Sound se caracteriza por llevar a cabo conciertos y grabaciones basadas en una libertad casi total en lo que respecta a la estructura musical y al desarrollo sonoro. Su música es un viaje a través de la improvisación pura, en el que cada elemento es el resultado de un diálogo constante entre las diversas capas sonoras desarrolladas por sus instrumentistas. Esta libertad permite a los músicos explorar un inmenso espectro de sonoridades, desde las texturas más sutiles hasta los flujos de sonido más extremos, con ritmos complejos e inesperados.

El concierto de esta noche propone una experiencia inmersiva en el mundo de las sonoridades experimentales. La música del trío no solo pone en entredicho los lenguajes tradicionales de músicas en que la improvisación juega un papel importante –por ejemplo, el jazz–, sino que también representa una síntesis de algunas influencias del Modernismo de la segunda mitad del siglo XX. Estas «composiciones en tiempo real», utilizando un término del compositor e improvisador Richard Barrett, son un reflejo del compromiso del grupo por una exploración sonora sin límites. Cada improvisación ofrece la oportunidad de sumergirse en un paisaje sonoro en constante evolución, en el que las texturas y los ritmos se fusionan en un torrente de sonido de enorme dinamismo.

El trompetista del grupo, Peter Evans, es reconocido por su técnica excepcional y un innegable compromiso con la música de vanguardia. A lo largo de las dos últimas décadas, Evans ha desarrollado un lenguaje musical singular que fusiona su destreza instrumental con un profundo interés por la experimentación tímbrica. Su trayectoria artística está influida por tradiciones de la improvisación libre y la música de creación estadounidense, con referencias tan destacadas como Anthony Braxton, Association for the Advancement of Creative Musicians (AACM) y George Lewis. Estas influencias han sido claves para la formación de su estilo único, que combina un control técnico considerable con la intensidad física que supone utilizar la trompeta como Evans.

El virtuosismo de Evans a la trompeta se complementa con la percusión dinámica de Mike Pride y la complejidad tímbrica y melódica de Tim Dahl, bajo eléctrico. Pride, además de batería, es también compositor, improvisador y vocalista. Conocido por sus colaboraciones con una gran variedad de grupos de estilos diversos en todo el mundo, dirige el cuarteto de jazz moderno From Bacteria To Boys, el grupo con siete baterías Drummer’s Corpse y el trío I Hate Work. Reconocido por su versatilidad, ha trabajado con referentes de la improvisación y el punk, como Anthony Braxton y Millions Of Dead Cops, y ha intervenido en más de cien grabaciones.

Por su parte, Tim Dahl tiene también una carrera diversa como bajista, teclista, vocalista y compositor, aunque es conocido principalmente como bajista del grupo de noise rock Child Abuse y de Lydia Lunch Retrovirus. Dahl ha realizado giras por América, Europa, Australia, Nueva Zelanda y Japón, y ha colaborado con músicos tan destacados como Yusef Lateef, Archie Shepp y Mary Halvorson. Su técnica y estilo combinan dosis de gran velocidad y sonoridades oscuras, creando paisajes sonoros de evidente innovación.

El trío no solo es una plataforma para la exploración musical de estos brillantes músicos, sino también una invitación al público a participar en este proceso creativo. La naturaleza improvisada de su repertorio convierte cada actuación en una situación irrepetible y ello le permite ofrecer experiencias únicas y lecturas singulares sobre el significado de lo que podemos o no considerar música.

Pulverize the Sound propone una atrevida exploración de las posibilidades de la música improvisada. Con su particular fusión de influencias contemporáneas y vanguardistas, el concierto de hoy promete ser una experiencia musical excepcional.

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